CUENTOS PARA NIÑOS SABIOS
🐥El Patito de Plástico🛁
Descubre la entrañable historia del Patito de Plástico, su primer encuentro con el agua y la magia de la bañera. Una lección sobre la diversión, risas y cosquillas, perfecta para compartir momentos inolvidables con tus pequeños exploradores. ¡Sumérgete en la magia del cuento que captura la esencia de la infancia y la alegría en cada burbuja! 🛁✨ #CuentosInfantiles #MagiaDelAgua #AventurasConPatitoPlástico
CUENTOS
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Cuenta una sabia que existió una vez un patito de plástico, era amarillo y tenía un pico de un rojo intenso.
Un día fue a parar de una tienda a una bañera. El patito no conocía el agua, pues desde que fue creado, solo había conocido plástico y más plástico y el polvo que se acumulaba en sus alitas y en su pico.
Pero un día unas manitas lo rescataron del estante de la tienda que no le gustaba nada, porque era muy aburrido y lo llevaron a aquel maravilloso lugar que todos llamaban: ¡bañera!
Cuando llenaron de agua la bañera, no entendía nada, pero le gustaba el sonido del agua al caer, poco a poco el agua iba subiendo y su cuerpo flotaba en ella. Todo aquello era muy, pero que muy divertido. Y cuando creía que había acabado la diversión, un líquido que olía a fresas y vainilla comenzó a llenar la bañera de espuma. ¡Cómo le gustaba aquello al patito de plástico! La espuma rozaba su cuerpo y le hacían cosquillitas.
De pronto, cuando creía que no podía ser más feliz, apareció aquella niña y se metió con él en aquel sitio tan divertido que era, ¡la bañera!
Lo que más le gustaba era que lo cogiera con sus manitas y le llenara todo el cuerpo de espuma, haciéndole muchas, pero que muchas cosquillitas. Ella también tenía espuma por todo el cuerpo, y él jugaba con su pelo y la espuma.
¡Qué buenos ratos pasaban riendo y jugando el patito de plástico y la niña con jabón en el pelo!
Pero todo se acababa cuando llegaban mamá o papá y sacaban a la niña. Entonces quitaban el tapón de la bañera, enjuagaban la espuma con agua y al patito lo dejaban en su esquina, esperando otro momento en el que la bañera se llenara de nuevo y volviera la niña para jugar otra vez.
Cuento contado, sonríe si te ha gustado

